domingo, 6 de septiembre de 2015

The Good Spy - The Life and Death of Robert Ames, by Kai Bird

Siempre me han interesado los libros y las películas sobre espías y espionaje. La captura de "inteligencia" en los conflictos a lo largo de la historia y su efectividad han sido decisivos en la resolución de estos conflictos.

Tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 surgió en EEUU el debate sobre si el gobierno americano habia invertido muchos recursos en la inteligencia electrónica descuidando el trabajo humano en el campo, la siembra de relaciones en los puntos en conflicto que puedan alertar, dar "estimaciones" sobre acontecimientos que sobrevienen, a tiempo para preparse ante ellos.

El libro de Kai Bird sobre Bob Ames, un agente de la CIA que llegó a ser el experto dentro de la Central sobre el conflicto de Oriente Medio, describe muy bien este cambio de "captura" de la inteligencia. Bob Ames representa el agente cultivado, enamorado de la zona en la que opera, que aprende con tesón y domina finalmente el árabe, y que es capaz de establecer relaciones sólidas, también de amistad, con personas influyentes que están aparentemente en el lado contrario. Empatiza con ellos y sin perder las referencias, es capaz de generar canales de comunicación inauditos, a través de los cuales los gobernantes pueden comunicarse.

Pero en este proceso de entender la vida y la actividad de inteligencia de Bob Ames, el libro hace un repaso muy necesario para mi a los acontecimientos en Oriente Medio desde finales de los cincuenta hasta mediados de los ochenta del siglo pasado. Acontecimientos donde es posible entender el enquistamiento de la situacion israelí-palestina, la situación del Líbano dominada por Hezbollah, y la ceguera y falta de visión en las políticas por parte de la partes en conflicto, Israel, la OLP, los EEUU  y los otros agentes en juego en la zona: Siria, Irán y las facciones politicas y religiosas en el  Líbano.

En este resumen me voy a referir más a la parte del libro que describe la actividad de inteligencia de Bob Ames, y su relación con los acontecimientos que se suceden en Oriente Medio en ese periodo, hasta el atentado contra la embajada de EEUU en Beirut en 1983, en la que muere Ames, que a los aspectos biograficos de Ames que me interesan menos.

Aunque tiene una formación militar intensa, tambien en comandos especiales, Bob Ames no es un agente "armado" al uso. No lo es en ninguno de sus destinos en el ejercito primero en Etiopia, ni en los destinos que tiene ya en la Agencia, en Yemen, Kuwait, Beirut, Teheran, y Beirut otra vez, con sus temporadas largas en Washington, particularmente al final de su carrera.

Ames se gradúa en la universidad, y ya en su destino de Yemen empieza con el estudio del árabe y con la lectura apasionada de todo lo que tenga que ver con la cultura árabe. Es un gran conversador, y un gran escuchador y poco a poco va haciéndose un círculo de amigos y de contactos allá donde va.

Frank Anderson, quien le sucede como experto en Oriente Medio, hace esta apología de Ames, ante su tumba en la que reune a un numeroso grupo de jovenes agentes de la CIA, el mismo dia de 1993 en que Rabin y Arafat se dan la mano en los jardines de la Casa Blanca, en presencia del Presidente Clinton: "Standing near the grave, Frank Anderson spoke briefly of Ames's career and how Bob's clandestine relationship with Arafat's intelligence chief Ali Hassan Salameh had brought the Palestinians in from the cold. Ames () was one of the CIA's fallen heroes, a man who was good at forming clandestine relationships in a dangerous part of the world. He was no Lawrence of Arabia. He had little patience with pretentiousness or patronizing 'Arabophiles' and fanatic adventurers. He was never naive about the Middle East, a cockpit of power politics. He understood the personalities and motivations of the revolutionary left in the Arab world as much as he appreciated the rituals of the Sheiks. Ames had understood that a good CIA officer must have a curiosity about the foreign other - and a certain degree of empathy in their struggles. He came to know kings, emirs and princes as well as revolutionaries and terrorists, goat herders and penthouse commandos. He was adroit of making his way through the wilderness of mirrors that was the Middle East. He was a naturally reserved, a man who easily kept secrets. He inspired trust, even in the company of men with bloody pasts. But he was also an intellectual, who later in his caree could brief a president or a secretary of state about the intricacies of Middle Eastern politics and history. He was a model intelligence officer". Hasta aquí el resumen de su personalidad.

La parte más interesante de su vida es su relación con el Oriente Medio, con el conflicto árabe-israelí y su extensión libanesa. Es esta parte de su historia a la que me voy a referir ahora.

El 5 de junio de 1967 comenzó la llamada guerra de los seis dias, en el que Israel derrotó a una coalición de paises arabes entre los que destacaban Egipto, Siria y Jordania. Israel destruyó la fuerza aerea de Egipto y redujo considerblemente la de Siria, y tomo la franja de gaza y la peninsula del Sinaí de Egipto, la orilla occidental del Jordan (Cisjordania) y parte de Jerusalen de Jordania y los altos del Golán de Siria. Entre otras consecuencias, se produjo el desplazamiento de 300.000 refugiados palestinos a Jordania. Fue una derrota humillante para el mundo árabe, para Nasser en particular, pero que tuvo consecuencias también para EEUU: 24.000 expatriados norteamericanos fueron expulsados de paises arabes y el sentimiento antiamericano se generalizó en el mundo árabe por su apoyo a Israel.

Ames llega destinado a Beirut en 1970 despues de destinos en Yemen y Kuwait. Beirut era una ciudad entonces muy agradable y tranquila. Allí contacta en 1969 con Mustafá Zein, un joven de origen chiita nacido en Tiro. Pese a que la minoria chiita en Libano ocupaba los ultimos puestos en la escala social, sirviendo a la comunidad Cristiano-Maronita y Suni, el joven Mustafá provenía de una familia acomodada que había hecho fortuna en el comercio y en la importacion de diamantes. Zein presenta Ames a Ali Hassan Salameh, miembro de Fatah y responsable de la inteligencia. Salameh dirige Force 17, el grupo encargado de la seguridad de Arafat. Salameh es hijo de un heroe de la causa palestina, Sheihk Hassan Salameh. Sheihk era ya un hombre buscado a los 23 años, en 1934, cuando se une a Abdul Qader al-husseini y su Jihad al-muqaddas contra el imperio britanico. En la revuelta árabe de1936-1939, Sheihk es un comandante de la milicia palestina. En 1938 es el ejecutor de la voladura de la linea del ferrocarril Lydda-Haifa. Perseguido por los britanicos y la Haganah (el brazo armado del movimiento sionista de la época) tenía sin embargo el apoyo del gran mufti de Jerusalen. Sheihk huye con el mufti a Baghdag en 1939, y poco después le acompaña a la Alemania Nazi. Los nacionalistas palestinos deciden abrazar la causa nazi, es decir al enemigo de su enemigo, en un error de cálculo monumental, no solo porque los nazis perderían la guerra, sino por el tamaño del holocausto que convertiría la alianza del mufti HajAmin Husseini en una mancha negra para la reputación de la causa palestina. Y Hassan Salameh estuvo directamente involucrado como agente clandestino para los alemanes. En 1941, el mufti se reune con Hitler al que sugiere una operacion paracaidista en Palestina para incitar un sublevacion. La idea languidece hasta el final de la guerra, cuando los alemanes activan la Operacion Atlas, que entre otras cosas tenia como objetivo envenenar el suministro de agua a la ciudad de Tel-Aviv.

El 6 de octubre de 1944 un pequeño comando paracaidista dirigido por el coronel de las SS Kurt Wieland, y del que forma parte Salameh, se lanza en el valle de Jericó. La operacion fue un desastre. Los britanicos detuvieron a Wieland pero no dieron con Salameh a pesar de poner precio a su cabeza.

El 29 de noviembre de 1947, una resolucion de la ONU programó el final del mandato britanico en Palestina para el 15 de mayo de 1948. En esa fecha Palestina sería dividida en un estado judio y otro palestino. Esa noche la poblacion judia en palestina celebró la decision, pero al dia siguiente guerrillas palestinas atacaron con metralletas y granadas un autobus lleno de judios que se dirigian a Jerusalen. El ataque se atribuye a Salameh. Una semana después Salameh dirigió a 300 de sus hombres en un ataque al barrio de Hatikva en Tel-Aviv. Perdió 60 hombres y tuvo que huir. Y volvió a los ataques a vehiculos en carretera abierta. Coordinaba su estrategia de controlar las carreteras con Abdul Qader, el lider palestino mas conocido, que intentaba conquistar Jerusalen. El 8 de abril de 1948 un centinela israeli acabo con la vida de Abdul Qader. El 30 de mayo, la milicia de Menachem Begin atacó la aldea estrategica de Ras-al-Ein que sumistraba el agua a Jerusalen. Salameh y su milicia contraatacó para retomar la ciudad, y en el fuego de mortero, fue herido Salameh, que fallecio en Ramalah el 2 de Junio. Su muerte marcó un antes y un después en la resistencia palestina al nuevo estado israelí. Salameh fue un patriota palestino, un guerrillero y un terrorista. Mató civiles por la causa palestina. Era descarado, heterodoxo y temerario. Su hijo heredaría todos estos atributos.

A principios de 1970 Ames y Ali Hassan Salam establecen un canal de comunicacion entre la OLP y el gobierno norteamericano que durará con intensidades diferente hasta los ochenta. Con los palestinos refugiados en Jordania, más numerosos que los propios jordanos, la situacion era confusa en lo que respecta a la continuidad del rey Hussein y la monarquia hasemita en Jordania. Los planes de la OLP conocidos por la inteligencia britanica incluian derrocar al rey. Probablemente hacia el verano de 1970  el director de la agencia, Richard Helms comunicó al presidente Nixon y a su "national security adviser", Henry Kissinger el canal abierto con la OLP. Ames y Salameh entablaron una relación abierta y cordial. Esta relación se hacia importante a medida que se iba calentando la situación palestina en Jordania. El embajador norteamericano en Amman, Henry Symmes, le dejó claro a Nixon que los dias de Hussein como rey en Jordania estaban contados. Hacia Junio de 1970 la situacion del pais era de "ciudad sin ley". Tanto los fedayines como el ejercito jordano cometieron atrocidades. Ese mismo mes el convoy del rey fue atacado en la calle, y el mismo Hussein participó en el tiroteo que siguió al ataque.

El gobierno norteamericano estaba dividido sobre el rumbo a tomar. Dentro de la CIA, la oficina de Jordania empujaba por una actuación del rey contra la OLP. Desde Beirut, Ames, una estrella en alza en la agencia, era contrario. Para Ames, tanto el rey como las tribus beduinas que formaban el nucleo de su ejercito eran tan extranjeros en Jordania como los palestinos. Vinieron del Hejaz, el oeste de la peninsula arábiga durante la primera guerra mundial. Los británicos impusieron el regimen hashemita sobre la población palestina. A O'Connel, el jefe de la CIA en Jordania, esto le parecia un argumentación más intelectual que practica. La realidad era que Hussein tenÍa 150 tanques y buena artillería. Se  veía venir la guerra civil. Los palestinos tenian 25.000 hombres en su milicia, pero durante el verano habían ido pasando armas a numerosos jovenes en los campos de refugiados. Podían sumar unos 40.000 hombres. El ejercito regular de Hussein contaba con 60.000 hombres, pero más de la mitad eran palestinos, y esa cifra era todavía más alta entre los oficiales. Pero los oficiales beduinos leales al rey controlaban las unidades acorazadas.

En Israel se mantenia el mismo debate en circulos politicos y militares. Por una partee, si los palestinos se haciam con el estado jordano, se daría forma a la resolucion de la ONU que abogaba por un estado palestino junto al israelí. Los israelis estaba divididos entre los que apoyaban al rey Hussein en la esperanza de llegar con el a un tratado de paz por separado (Golda Meier, Aba Eban, Yitzak Rabin) y los que pensaban que se resolvia mejor el problema palestino con un estado propio y ocupados en la siempre incomoda tarea de gobernar (Ezer Weizman, Moshe Daya , Shimon Perez y Ariel Sharon). Qué poco clara es a menudo en politica la decisión a tomar, y qué responsabilidad tienen los elegidos para tomarlas, pues siempre tienen consecuencias. El destino de pueblos y naciones depende de las decisiones de unos pocos que las toman con informacion limitada y sesgada. Esta reflexión está presente a lo largo de todo el libro.

El 6 de septiembre de 1970 el ambiente se calentó aún más cuando comandos palestinos secuestraron cuatro aviones comerciales en el mismo dia. Dos de los aviones fueron dirigidos a un aerodromo abandonado al norte de Amman. Tres dias más tarde se les unió un nuevo avión secuestrado. En total 426 rehenes rodeados por cientos de legionarios acorazados fieles al rey Hussein. Estos secuestros respondían a una estrategia cuidadosamente diseñada para exponer la cuestión palestina ante el mundo. Un año antes, Golda Meier había declarado, que cuando Israel fue creado en 1948, "it was not as though there was a Palestine people...They did not exist". Los secuestros habian conseguido su principal objetivo: dar visibilidad a la causa palestina.

En el aerodromo, la situacion se alargaba ya diez dias. Parecia una humillación para el rey Hussein. Finalmente, el 16 de septiembre, el rey Hussein decretó ley marcial y envió 50 tanques a posiciones por encima del campo de refugiados palestino en Amman. Y a la mañana siguiente, las artilleria jordana comenzó a disparar contra posiciones de la guerrilla palestina. El bombardeo fue indiscriminado. Los jordanos no querían lanzar la infanteria por los barrios de Amman, donde la guerrilla se movía mejor en el desorden. Así que lanzaron el ataque con acorazados precediendo a la infanteria. El resultado fue una carniceria. La aviacion jordana lanzó bombas de fósforo y napalm en los campos de refugiados. Durante 10 dias, los fedayines aguantaron el tipo. Los sirios enviaron acorazados desde el norte pero no se atrevieron a darles cobertura aerea por miedo a una intervencion israeli o americana. Pero no fue necesaria ninguna intervencion de Israel. Los acorazados del rey Hussein avanzaron, los sirios se retiraron y los palestinos empezaron a ceder. Los bombardeos se reanudaron. Unos 3.400 fedayines y civiles perdieron la vida.

A finales de septiembre los palestinos accedieron a un alto el fuego intermediado por Egipto. Se liberaron el resto de los rehenes de los aviones y los fedayines se retiraron de Amman. Salameh sacó a Arafat disfrazado de Amman en un avion a El Cairo. En Julio de 1971, Al-Tal, el primer ministro jordano ordenó atacar nuevament a los fedayines. Despues de cuatro dias de bombardeo, 1.000 fedayines muertos, 2.300 hechos prisioneros, y otros 20.000 arrestados, Arafat y sus comandantes fueron expulsados al Líbano. Los palestinos estaban desolados y humillados. El mes de Septiembre de 1970 fue una calamidad nacional para los palestinos.

El desastre de septiembre 1970 dejó a los fedayines de Fatah desmoralizados y dio alas a la oposicion palestina a la izquierda de Arafat. Los colaboradores de Arafat le urgieron a radicalizarse. Surgió un duro debate en la OLP. Y Arafat discretamente autorizó a su segundo, Abu Iyad a organizar una fuerza clandestina para llevar la guerra a occidente, y vengarse de los hashemitas. Con la bendicion de Arafat, Abu Iyad creó Septiembre Negro, que operó por su cuenta, pero con las comunicaciones y la financiación de Fatah. El primer golpe fue el asesinato del primer ministro jordano al-Tal en el Cairo. Luego vendria una larga sucesión de atentados y secuestros. Pero el más relevante fue sin duda el secuestro y asesinato de atletas israelies en las olimpiadas de Munich en agosto 1972. La idea se le ocurrió a Abu Iyad en Roma, en Julio de ese mismo año. Munich fue una tragedia, tambien para los palestinos. La operacion se ha convertido en una mancha permanente en el honor del pueblo palestino. Tres dias despues los israelies se vengaron bombardeando los campos de refugiados palestinos. El ataque terrestre que le siguió, causó 45 muertos palestinos. Y el 5 de septiembre de 1972 Golda Meier autorizó la operación "Ira de Dios", para asesinar a todos los que tuvieran sospecha de haber participado en el atentado de Munich. A lo largo del siguiente año los israelies asesinaron a diez árabes en esta operación. Sobre la involucración de Salameh en Munich hay opiniones divergentes, pero los israelies lo pusieron en lo alto de su lista de objetivos.

Hacia finales 1973, Arafat convenció a su círculo próximo de abandonar los objetivos terroristas en America y en Europa y centrarse en Jordania e Israel. Sobre todo en Jordania, pues se imponía la realidad que "Israel is here to stay" y por el contrario, Jordania debería ser el hogar de los palestinos. A través de Ames, la OLP planteo  a los EEUU una solucion con dos condiciones: la OLP reconocería el estado de Israel y los palestinos remplazarian el reino hashemita en Jordania. Pero Kissinger y su gobierno consideraban a Hussein un aliado de EEUU y un camino para la solucion del conflicto. Ademas Kissinger dudaba que este arreglo fuera satisfaccion suficiente para los palestinos. Finalmente Kissinger invitó a Arafat a negociar, pero no creyó en la seriedad del reconocimiento del estado de Israel po parte de los palestinos. Pero tras el intercambio de mensajes cesaron los ataques a objetivos norteamericanos, al memos desde la rama de la OLP bajo control de Arafat.

En 1974, Arafat y su consejo elaboraron su estrategia de 10 puntos en la que declaraban su intencion de establecer un estado palestino sobre "cualquier porcion de tierra palestina, que sería posteriormente liberada".  Abandonaban así su aspiracion de establecer en Jordania una republica Palestina, y apuntaban a Cisjordania y la franja de Gaza, ocupadas por Israel como objetvos inminentes y embrión  de una solucion final con dos estados. Esta evolucion supuso un antes y un déspues para la OLP. A finales de 1973 Arafat había cerrado Septiembre Negro. La force 17 de Salameh fue la encargada de atacar los HQs de Abu Nidal en Libia y la encargada de garantizar la seguiridad de americanos y europeos en Libano.

En 1975 las distintas facciones del Líbano empezaron a matarse los unos a los otros. Cristianos maronitas,drusos, sunis y chiis. Se puede decir que arrancó el 13 de abril de 1975 con la masacre del autobus, en la que 27 palestinos y musulmanes libaneses fueron ásesinados por las falanges maronitas. Así arrancó una guerra civil que duraría 15 años y costaría 130.000 vidas. Los cristianos maronitas peleaban por un Líbano bajo su dominio, a pesar de estar em minoria frente a drusos, sunis y chiis. Los refugiados palestinos representados por la OLP fueron poco a poco arrastrados  a la guerra civil peleando contra los maronitas, contra los que tambien se enfrentraron los sirios. Las alianzas cambiaban constantemente. A medida que la situacion se deterioraba, Salameh se hizo más valioso para los norteamericanos, al hacerse esencial para la seguridad de la embajada de EEUU. Esto quedó todavia mas claro tras el asesinato del embajador Meloy. La evacuacion de 263 ciudadanos americanos con la proteccion de los palestinos fue publicamente agradecida por el presidente Ford. Salameh y Bashir Gemayel eran enemigos pero se respetaban y admiraban como señores de la guerra que eran.

En noviembre de 1976, tras la derrota de Ford, Ames persuadió al director de la CIA, George Bush para que invitara a Salameh a Washington. Israel daba apoyo a los maronitas. Estos por su parte aspiraban recibir de los norteamericanos en Líbano el mismo soporte que estos daban a los isrelies en Palestina.

La cuestión palestina debería haber tenido la maxima prioridad en Washington. En Marzo 1977, Carter habló por primera vez de "una patria para los refugiados palestinos". Poco despues el lider de los drusos, Kamal Jumblat  fue asesinado. Drusos y palestinos se habian hecho con el control del 70% del territorio libanes al empezar la guerra en 1976. El regimen sirio de Assad pensó que esta expansión no solo amenazaba a los maronitas sino tambien su influencia en Libano, que favorecía a los Alauitas, una minoria cercana al chiismo. Con toda propabilidad los sirios ordenaron su asesinato. Tras el crimen, los drusos ásesinaron a cuantos cristianos pudieron encontrar en el Shuf, los montes al sur de Beirut. Mas de 140 personas, la mayoria mujeres y niños fueron masacrados. Los falangistas recibian armas y ayuda de Israel para atacar aldeas chiis y las posiciones palestinas.

La situacion en el sur del Líbano era frustrante para Ames. Los falangistas y los palestinos eran utilizados por israelies y sirios descaradamente; les hacian el trabajo sucio. Los falangistas buscaban un estado separado apoyado por EEUU, al igual que Israel. Los chiis, cogidos en medio de la batalla, eran cada vez más parte de ella, y fueron tomando poco a poco de Beirut Oeste. Los palestinos y chiies, las poblaciones mas pobres y desarraigadas del mosaico libanes estaban labrando poco a poco una nueva alianza. En unos pocos años esta alianza crearía una nueva formación política: Hezbollah - el partido de Dios.

En Marzo de 1978 un comando de once fedayines dirigidos por una mujer desembarcaron en la costa norte de Israel y secuestron un autobus. Tras nueve horas de disparos, casi todo el comando atacante fue aniquilado junto a treinta y tres israelies, entre ellos trece niños. Este sigue siendo hoy el mayor atentado terrorista dentro de Israel. Tres dias mas tarde, más de 25.000 soldados israelies invadieron el sur del líbano. En la invasión murieron unos dos mil civiles libaneses y otros 250.000 huyeron como refugiados.

En la mañana del 13 de junio 600 falangitas de los Gemayel asaltaron una familia maronita rival, los Franjiehs, con el objetivo de matar a Tony Franjieh. Mataron 30 guardaespaldas y luego asesinaron a Tony, su mujer y su hija. El 28 de Junio, 33 falangistas fueron sacados de su casa en Baalbek y ejecutados, probablemente por los sirios en venganza por la accion contra sus aliados los Franjiehs. La guerra civil se consolidaba.

El 22 de enero de 1979 el mossad asesinó a Ali Hassan Salameh. Bashir Gemayel estuvó en su funeral y su guardia personal disparó salvas de honor. En Israel se vivió como una fiesta por la ejecucion de quien considerban responsable de los sucesos de Munich 72. La CIA no lo vió así. Lo consideraron un error garrafal.

El 1 de febrero de 1979, solo nueve dias despues del asesinato, el ayatollah Jomeini llegó a Teheran. El 11 de febrero sus seguidores se habian hecho ya con el gobierno de Irán.
Con la administracion Reagan llegó Bill Casey a la Casa Blanca. En seguida pidió ver a Ames que era ya el experto en Oriente Medio de la casa.

En abril de 1982 Ames reunió a tres de sus analistas con Mustafá Zein y les preguntó si pensaban que iba a haber otra guerra convencional en Oriente Medio. Zein pensaba, tras estudiar a Sharon, que estaba esperando el momento para invadir Líbano y expulsar a la OLP de allí. "Vendrá con una columna de acorazados por la costa y otra por las montañas todo el camino hasta Beirut". Ames sugirió a Zein que hiciera llegar su pronóstico por escrito a Arafat.

El 3 de Junio de 1982, el embajador Israelí en Londres fue herido en un atentado organizado por Abu Nidal. Los Israelies no hacian distingos: "Son todos OLP". El atentado contra el embajador Argoc sirvió de pretexto para la invasión del Líbano que los israelies ansiaban con el el objetivo de expulsar a la OLP. El 6 de Junio una fuerza de ataque israelí con más de 1500 acorazados invadió Líbano. En tres días se plantaron a las afueras de Beirut. George Schultz, que fue luego Secretario de Estado con Reagan escribió en sus memorias "el objetivo real israelí era la destrucción de la OLP, y de su liderazgo del movimiento palestino". Pero Sharon habia recibido una luz verde tácita de Alexander Haig, el Secretario de Estado a la fecha, en la reunion que habian tenido en Washington el mes anterior. Ames despreciaba a Haig. Este permiso tácito a Sharon lo consideraba altamente irresponsable. La Secretaría de Estado y la Casa Blanca estaban cada vez mas desconectados. Unos días mas tarde Zein escribió un memo a Ames en el que concluía que "dado que los regímenes arabes, conservadores o radicales son caras diferentes de la misma moneda. Corruptos, opresores e impotentes, no pueden hacer frente, ni politica ni militarmente a Israel". Zein pensaba que solo quedaban dos opciones politicas en el mundo árabe: la izquierda radical o el fundamentalismo islamico. Yque la guerra del líbano reforzaba la opción religiosa. Predijo que el fundamentalismo islamico prevalecería, y que esto finalemente, se volvería contra Israel y los EEUU. La política israelí sobre la OLP era de visión corta. Y Ames y Zein pensaban que el apoyo incondicional de EEUU a la politica israelí era un error que se pagaría caro.

Reagan reaccionó y envió a Habib para negociar un alto el fuego. En medio de la crisis Shultz remplazó Haig en la Secretaria de Estado. Ames se entrevistó con él numerosas veces a lo largo del mes de Julio. Ames trató de convencer a Shultz que el sitio de Beirut podía convertirse en una oportunidad para la administracion Reagan para conseguir un gran paso adelante. La OLP, decia Ames, estaba preparada para aceptar la condición mas relevante de Washington: aceptar la resolucion 242, con el derecho de Israel "a existir", y la retirada de Israel de  los territorios ocupados (en 1967). Y solo contra una condicion. Washington tendria que emitir una declaracion apoyando el derecho Palestino a la auto-determinación.

A estas alturas de Julio 1982, Arafat tenía ya la firme determinación de evacuar a la dirección de la OLP y la mayor parte de sus guerrilleros de Beirut, pero todavia no tenian destino. A final de Julio el alto el fuego se extinguió y comenzaron los bombardeos de nuevo.

Israel arreció los ataques a mediados de agosto y Arafat empezó a organizar el embarque de sus hombres, con la promesa de Habib (del gobierno de EEEUU), de que la Fuerza Multinacional protegeria a los civiles palestinos que se quedaban en los campos de refugiados. Habib consideró que 2.000 soldados serian suficientes en la Fuerza Multinacional. Pero se equivocó.

Shultz y sus diplomaticos preparaban un plan de paz pero los israelies no querian ni oir hablar de ello, ahora  que tenian a los palestinos a punto de salir de Líbano. Finalmente, el 30 de agosto de 1982, Arafat salió hacia Tunez en barco con 8,500 guerrilleros ante la mirada atenta de los francotiradores israelies. Habib estaba entusiasmado de, exito tras tres meses de fina diplomacia. No todos los palestinos estaban convencidos de la salida.

El 1 de septiembre Ronald Reagan pronunció un discurso marcando las condiciones del proceso de paz, del camino hacia la autonomia de los palestinos en Gaza y Cisjordania, de la paralizacion de los asentamientos judios en esas regiones que fue controvertido.

Pero la sangre correría pronto otra vez en Líbano. A finales de agosto de 1982, Bashir Gemayel fue elegido por poco margen presidente del Líbano. Todo el mundo sabía que era el candidato de Israel (y de EEUU). Tenía 34 años cuando fue elegido. Pese a que en su primera semana de mandato decidió distanciarse de Israel y no actuar como una marioneta del vecino pais, Hafed Assad ya habia tomado su decisión de acabar con el joven presidente, cosa que hizo el 14 de septiembre, volando la sede del partido maronita, con Gemayel y otros veintiseis colegas falangistas. Para entonces, los marines y el resto de la fuerza multinacional ya habían salido de Beirut. Weinberger, secretario de defensa pensó que ya no eran necesarios a pesar de la promesa norteamericana de proteger a los palestinos que quedaron durante un periodo razonable de tiempo.

Los israelies no perdieron tiempo, y pese a su promesa a los norteamericanos de no entrar en Beirut, la ciudad estaba en llamas cuando llegó el enviado norteamericano Morris Drapper. Los israelies mintieron descaradamente a sus aliados norteamericanos. Drapper se enfrentó a Sharon y este le dijo que entraron en los campos de refugiados porque habian quedado 2,500 terroristas allí. Draper no se podía creer que los israelies fueran a dejar a los falangistas entrar en los campos de Sabra y Shatila. Incluso el General Etian, israeli parecia entender las consecuencias de semejante acción. Drapper sabía que los israelies no deberían estar en Beirut Oeste, no debería estar rodeando los campos de refugiados. Los campamentos estaban desarmados. No ofrecian peligro para Israel.

Pero mientras Drapper y Sharon discutían, a las 6pm del 16 de septiembre de 1982, 150 falangistas entraron en los campos de Sabra y Shatila. Durante los siguientes dos dias y noches, los falangistas asesinaron entre 1.000 y 2.500 personas, en su mayoria mujeres, niños y hombres de avanzada edad, mientras las tropas israelis custodiaban el perimetro de los campos. Los reporteros que pudieron entrar poco despues a los campos describieron con detalle el horror que encontraron.

Sharon era culpable, pero tambien el gobierno norteamericano, que a traves de Habib habia prometido protección a los que quedaron en Libano. Habib confirma que firmó esa promesa, y que por su parte recibió garantias de Bashir y de Sharon. Schultz también concurre con la responsabilidad norteamericana. Reagan decidió el 20 de septiembre que los marines volverian como parte de una fuerza multinacional, pero ya nada seria igual en el Líbano. Los EEUU habian perdido la iniciativa y el respeto en Oriente Medio.

La invasion israelí del Libano fue un desastre para todas las partes. La masacre de Sabra y Shatila seria la masacre de Sharon, pese a que los israelies no mataron a nadie. En Israel, Begin fue forzado a aceptar la creación de una comision independiente que concluyó que el ejercito israeli permitió la entrada de los falangistas sin consideracion del peligro que suponia. Acusó a Sharon de esta decisión. Y pidió su dimisión. Los israelies no abandonaron el libano hasta 18 años mas tarde.

La invasión por parte de Israel del Libano ciertamente expulsó a la OLP a Tunez, pero esto solo sirvió para crear un enemigo mucho mas peligroso en el Libano. Tras la masacre en los campos de refugiados se creó Islamic Amal que con el tiempo se convertiria en Hezbollah, el Partido de Dios. La invasión Israelí impulsó a los chiies. El nuevo regimen en Irán apoyándose en Siria les dió y les da apoyo logístico e ideológico.

Al año siguiente, uno de los chiies miembro de Force 17 que se habian quedado en Libano seria el organizador del coche bomba que mato a 63 personas en la embajada norteamericana en Beirut, entre ellos a Robert Ames. Y con él, no solo un experto en Oriente Medio sino tambien una manera de hacer inteligencia.

El 23 de Octubre de 1983, dos terroristas suicidas mataron 241 marines norteamericanos y 58 paracaidistas franceses de la fuerza multinacional en Beirut. La orden de evacuación que le siguió reflejó mejor que ninguna otra cosa el fracaso de la politica norteamericana en Oriente Medio de las ultimas dos décadas a pesar de la posición de influencia de norteamerica en la region.

miércoles, 18 de febrero de 2015

El Capital en el siglo XXI - Thomas Piketty

Thomas Piketty - El Capital en el Siglo XXI

Tras leer el libro de John Stiglitz, The price of inequality, que me decepcionó por su superficialidad y más viniendo de un premio Nobel de economía, me quedaron pocas ganas de leer más sobre desigualdad durante una temporada, a pesar de lo relevante del tema y su actualidad. No estaba desde luego entre mis planes la lectura del libro de Piketty, con sus disuasoria extensión en páginas.

Fue un artículo en el blog "Nada es gratis" que citaba tres artículos con críticas del libro, y la lectura de estos artículos los que me animaron a leerlo. Particularmente interesante es el ensayo-artículo firmado por los compatriotas de Piketty Bonnet, Bono, Chapelle y Wasmer ("Does housing capital contribute to inequality?"), muy documentado y argumentado, que reconoce por una parte el tremendo trabajo de compilación de datos en el libro de Piketty y por otra muestra el desacuerdo de los autores sobre el tratamiento del capital inmobiliario y su valoración en el análisis de la acumulación del capital que hace Piketty en su libro. Siendo una parte muy relevante del capital total, y particularmente de su crecimiento, el ensayo de sus colegas franceses viene a poner en cuestión no tanto el trabajo de Piketty, que es descomunal y muy interesante, sino su tesis central, que es que la desigualdad va a crecer de una manera descontrolada en el siglo XXI por la “dinámica explosiva de la acumulación de capital”. Entraré en este detalle más adelante.

Pero vamos ya con libro. Lo primero que hay que decir es que Piketty escribe bien. Entretenido. Y esto no es lo normal en el mundo de los economistas. Es cierto, y es una de las críticas constantes que recibe, que de puro insistir en sus argumentos para que queden claros, el libro se le va largo de páginas. Probablemente hubiera servido el propósito del autor con la mitad.

Piketty comienza con una declaración de principios: la desigualdad no es necesariamente mala en sí misma: la cuestión básica es saber si está justificada, si hay razones que la justifiquen. Y cita el  artículo 1 de la Declaración de los Derechos del hombre y del ciudadano de 1789 que aceptaba la desigualdad si “fundada sólo en la utilidad pública” .
Dice y lo repite, no sin razón, que durante largos periodos de tiempo, la fuerza más grande a favor de una mayor igualdad han sido la difusión del conocimiento y las habilidades.
Pero a favor de la desigualdad cuentan:

  • Los súper-sueldos de algunos profesionales y directivos.
  • El proceso de acumulación y concentración de riqueza cuando el crecimiento de la economía es débil y el retorno del capital alto. Esta es – dice Piketty – la mayor amenaza para la desigualdad en el largo plazo.


En cuanto a la distribución de la renta nacional entre renta del capital y renta del trabajo, la percepción generalizada entre los economistas, era que históricamente, este ratio había estado tradicionalmente en 2/3 trabajo y 1/3 capital. Pero la realidad era un poco más compleja, de acuerdo con el autor. Los economistas también asignan al “capital humano” un papel fundamental en el crecimiento de las economías modernas, y por tanto, las rentas del trabajo deberían tomar una parte mayor de la renta nacional, y de hecho Piketty afirma que esa es la tendencia que se vislumbra en las cifras, si bien el avance es modesto (lo cual contradice ciertamente las tesis fundamentales de su libro).

Piketty prefiere el ratio capital acumulado/renta (el ratio de todo el stock de capital sobre la renta anual) más que el enfoque en la distribución de la renta total en rentas de capital y rentas del trabajo que había sido la métrica más común, quizá debido a las dificultades para calcular el primer ratio.

En cuanto a las rentas que unos países reciben de otros, Piketty encuentra que en general, la renta nacional en la mayor parte de los países estudiados tiene diferencias entre el 1 ó 2% del GDP, lo que viene a decir, que los flujos de dividendos, intereses y rentas que entran en un país es comparable a los flujos que salen. Esto destruye el mito de que Francia es propiedad de los pensionistas Californianos o del Banco de China, y el de que los EEUU pertenecen a inversores japoneses o alemanes! La desigualdad con respecto al capital es mucho más un asunto doméstico que internacional. La desigualdad en la propiedad del capital – afirma Piketty – pone a los ricos y pobres dentro de un país en conflicto, mucho más que a un país con respecto a otro, cosa que no siempre ha sido así. Pero aún más, Piketty afirma que hay un proceso global de convergencia en el que los países emergentes van acortando diferencias con los desarrollados, a pesar de que aún se mantienen desigualdades sustanciales entre países ricos y pobres. 

Contra las percepciones  contrarias aireadas en tantos foros. El aislamiento, dice también Piketty, nunca ha promovido la prosperidad. Y también insiste, en que el principal mecanismo para la convergencia (la igualdad) a nivel internacional y nacional es la difusión del conocimiento.

Pese a que no aboga por un descontrol demográfico, Piketty afirma que a igualdad del resto de variables, un crecimiento demográfico fuerte tiende a jugar a favor de la igualdad, pues reduce la importancia de la riqueza heredada: cada generación debe, de alguna manera, construirse a sí misma.

Por otra parte, la riqueza pública en la mayor parte de los países es insignificante, pues los activos públicos están minorados por una deuda, prácticamente del mismo importe, por lo que la parte relevante de la riqueza neta está en manos privadas.

Las tesis de Piketty

1) La llamada “primera ley fundamental del capitalismo” no es una ley, como bien critican algunos, sino una identidad, una tautología.

α = r x β , donde α es el % de renta del capital en la renta nacional, r es el retorno del capital, y β el % de capital sobre renta nacional. Así, si β=600% y r=5%, entonces α=30%. Pura definición. No se sabe bien donde está la ley. Tampoco Piketty insiste demasiado en este “descubrimiento”.

2) La segunda ley fundamental del capitalismo tiene que ver con la relación entre r (retorno del capital ) y g (% de crecimiento de la economía). Cuando r>g, dice Piketty, el capital entra en una espiral de crecimiento con un aumento asfixiante de la desigualdad. La forma más apropiada para eludir este destino, dice Piketty, es un impuesto mundial sobre la renta. 

Piketty, en su capítulo más interesante desarrolla esta tesis basándose en la información acumulada sobre el ratio capital / renta en varios países (Francia, UK, USA y Alemania). Piketty nos muestra los crecimientos de este índice β históricamente, y particularmente su crecimiento desde los años 1970 hasta ahora. Este ratio esta dividido en capital agrícola, housing, otro capital y capital extranjero. Es muy interesante y central la observación de que el crecimiento de  β los años 70 ha estado concentrado fundamentalmente en el capital inmobiliario residencial en los países estudiados, con la excepción de EEUU. En Francia, UK y Alemania,β ha pasado del 400% al 600% provocado casi exclusivamente por el capital inmobiliario, mientras que en EEUU este ratio no ha aumentado, entre otras cosas porque no ha aumentado tampoco la participación del capital inmobiliario.

Hay dos consideraciones muy importantes que hacer a la valoración del capital inmobiliario en esta discusión, y ambas son el centro de la crítica de los colegas franceses a la tesis de Piketty:

  • La primera es que Piketty considera el valor del capital inmobiliario calculado por los precios de venta, y no sobre las rentas de ese capital. Estos autores observan que mientras los precios de las ventas de inmuebles ha aumentado  en estos últimos veinte años, la renta de esos de esos mismos inmuebles no ha aumentado al mismo ritmo. Cuando calculan el valor del capital inmobiliario a partir de las rentas de esos inmuebles, no hay tal crecimiento de β, y por tanto la tesis de un crecimiento en espiral de la desigualdad se desvanece.

  • La segunda es que es precisamente el capital inmobiliario la partida de capital que genera más igualdad, pues en todos estos países la gran fuente de ahorro popular se concentra en la propiedad de la vivienda habitual. Así en España el 83% de la población vive en casa de su propiedad. En UK esa cifra está actualmente en el 70% (del 37% en 1950) en Francia en el 56% (del 30% en 1950), en EEUU en el 60%. Es decir, ese aumento del valor del capital inmobiliario, que provoca, si se calcula en términos de precio, el crecimiento de β, es precisamente la forma más “igualitaria” de acumulación de capital.

Buscando soluciones a su conclusión de que la inecuación r>g producirá un aumento inaguantable de la desigualdad, Piketty propone, y es su propuesta más insistente, un impuesto sobre el capital, que tiene que tener escala global. Un impuesto que reducirá r y hará menor la diferencia con g. Un impuesto que tendrá en cuenta el tamaño del patrimonio a tasar, pues la rentabilidad del capital guarda una relación con el tamaño de ese patrimonio, como veremos en los legados de las universidades más adelante.

Mis notas sobre el libro incluyen las siguientes referencias en el libro de Piketty:

  • Los crecimientos históricos han estado en el entorno del 1%-1,5% anuales, salvo en los periodos de post-guerras donde el crecimiento se ha situado en el 3%-4%
  • Cuando se tienen en cuenta todos los impuestos, la media de los impuestos al capital en la mayoría de los países desarrollados está en el 30%
  • Partiendo de que la desigualdad social es de por sí inmoral, por qué no ser decididamente inmoral y expropiar el capital con cualquier método disponible? (dice Piketty!!)
  • La modernidad democrática está fundada en la creencia de que las desigualdades basadas en el talento individual y el esfuerzo están más justificadas que otras desigualdades.
  • El 10% de la población con mayor renta y el 50% de menor renta no son las mismas personas que constituyen el 10% superior y el 50% inferior en la distribución de riqueza. El 1% que “gana” más no coincide con el 1% que “posee” más.
  • Hemos pasado de una sociedad de rentistas, a una sociedad de ejecutivos. Los ingresos del capital solían dominar el 1% de renta superior, pero hoy solo dominan el 1 por mil superior.
  • El porcentaje de renta, del 10% de población que más gana ha tenido dos picos en los últimos 100 años: el primero en 1928 y el segundo en 2007, en vísperas de las grandes crisis. Una conexión?
  • Del crecimiento total de la economía norteamericana entre los años 1977 y 2007, el 10% más rico se apropió del 75% del crecimiento de la renta, y el 1% más rico, del 60% del incremento total en este periodo. Para el 90% menos rico, la tasa anual de crecimiento de la renta fue inferior al 0,5% en ese periodo.
  • En todos los países de habla inglesa, la principal razón del aumento de la desigualdad de la renta en las décadas recientes ha sido el surgimiento de los “supermanagers”. En contraposición, la Europa continental y el Japón apenas han sufrido incremento en el porcentaje de la renta del 1% que más ingresa desde los años 70 (del 7% al 9%)
  • En la Europa continental y en Japón, la desigualdad de la renta todavía hoy permanece por debajo de lo que era al principio del siglo XX, y no ha variado mucho desde 1945.
  • La revolución francesa no tuvo mucho impacto en el ratio capital/renta, ni en la distribución de la riqueza.
  • Por qué no hemos vuelto a la desigualdad en la riqueza existente en la Belle Epoque, y estamos seguros de que esta situación es estable e irreversible?. Piketty dice que la respuesta son los impuestos, que han reducido el retorno neto del capital, y el cambio de rentas del trabajo a rentas del capital en el 1% superior, y además porque la tasa de crecimiento de la economía ha sido superior a la de siglos anteriores.
  • Herencias. Cúal es el % de las herencias anuales sobre la renta nacional? En Francia es aproximadamente de un 20% hasta 1910, y de un 8% a un 12% hasta ahora.
  • El rebote de la herencia es todavía incompleto y su evolución está aún en curso.
  • La lógica r>g implica que el emprendedor siempre tiende a convertirse en rentista. Esta es la justificación para un impuesto anual progresivo para las grandes fortunas en el mundo que Piketty propone como una cruzada para reducir la desigualdad en la riqueza.
  • El porcentaje de la riqueza heredada sobre la riqueza total de los vivos: es una “U” con un mínimo en los 70 (en el 45%), máximos en los flancos, del 90% en 1910 y del 65% en 2010.
  • Nos hemos movido de una sociedad con un número pequeño de rentistas a otra con un número bastante mayor de rentistas menos ricos.
  • La rentabilidad de los grandes patrimonios. Piketty analiza los legados gestionados por las grandes universidades americanas en el periodo 1980-2010 y concluye que la rentabilidad media de los patrimonios de 850 universidades americanas es del 8,2%. Harvard ($30bn), Yale y Princeton un 10,2%.
  • El gasto de los estados permanece en el 10% de la renta nacional hasta principios del siglo XX. Desde entonces, la educación y la sanidad (10-15%) y las pensiones y transferencias sociales (15-20%) han elevado el nivel de gasto estatal al 30% en EEUU y entre el 40% y el 50% en Europa.
  • No es ni deseable ni realista un crecimiento drástico del tamaño del estado social.
  • La educación y la sanidad suponen el 20% del empleo y del GDP en los países desarrollados.
  • Al final del libro Piketty hace unos comentarios interesantes sobre las limitaciones de la eurozona y el €, en tanto que no tengan un parlamento específico y no el parlamento Europeo, donde se integran países con distinta vocación europeísta y no integrados en el Euro.

Coincidimos plenamente en el tratamiento del impuesto de sociedades (para evitar el arbitraje que hacen las compañías multinacionales para buscar la menor fiscalidad posible; que la encuentran) a través de un impuesto consolidado (europeo por ejemplo) con asignación a los países en función de las ventas, por ejemplo, o de las nóminas pagadas.

El último párrafo del libro merece un espacio y no ser traducido, pues es magnífico, y llama a un mayor interés de toda la ciudadanía hacia los asuntos económicos:

“Yet it seems to me that all social scientists, all journalists and commentators, all activists in unions and in politic of whatever stripe, and specially all citizens should take a serious interest in money, its measurement, the facts surrounding it, and its history. Those who have a lot never fail to defend their interests. Refusing to deal with numbers rarely served the interests of the least well-off”.